De nuevo os traemos una nueva revisión de un plato tradicional, ya os contamos la semana pasada con el ajoblanco que habíamos hecho pruebas con el salmorejo, y de nuevo la prueba consistia en eliminar el pan. Esta idea se la vimos a varios creadores de contenido el año pasado y nos dispusimos a prepararlo este verano. Lo dicho, se elimina el uso de pan, y en su lugar, se añade huevo duro o cocido, un elemento que le aporta textura y aroma a salmorejo. Desde luego quien decidiera que éste era un buen sustituto, quizás basándose en la popular mayonesa con huevo duro, dio en el clavo.
La verdad es que eliminando el pan se obtiene una porra más liviana, más sabrosa y con menor número de calorías ¿Y por qué nos llamó la atención preparar esta receta cuando a nosotros nos da igual todo esto? Pues porque a nuestro hijo Jorge el salmorejo le parece un plato pesado, y siempre que lo preparamos, come muy poco. Él es más de gazpacho, le gusta más el concepto de beber, le pasa un poco como a mí, aunque ojo, a mí el salmorejo sí que me gusta mucho, de hecho, lo preparamos no sólo en verano, sino durante todo el año. Acordaros de las recetas que tenemos ya publicadas la receta del salmorejo perfecto o el exquisito salmorejo hecho con picos.
Pues no coló. Creímos que el problema del salmorejo era que con el pan la porra quedaba más densa y pesada, y no, esta versión le siguió pareciendo pesada y ya no sabemos muy bien por qué. Quizás lo que no le gusta es que lleva más aceite de oliva virgen extra que el gazpacho, pero da igual. De toda esta historia se extrae una segunda lectura, y es que, si tampoco le ha gustado la versión sin pan, es porque esta variación es muy similar a la receta normal, y eso era buena señal. ¿A quién le recomendamos entonces esta versión? Pues sin duda a la comunidad celíaca, y también, para toda esa gente que por dieta quiera rebajar la ingesta de calorías, ya que obviamente el pan aporta un plus importante.
Y antes de explicaros cómo se preparar hay que tener en cuenta dos detalles, el primero, y es clave, es que debemos mantener con el tomate y el huevo la textura del pan. Para ello usad tomates pera, que son más carnosos y tienen menos agua, si usáis tomate rama, tomates de huerto o Daniela como hicimos en esta ocasión, estos dan más agua y en ese caso lo ideal es desechar la parte de las semillas en algunas piezas. Y desde luego en esta versión de salmorejo sin pan jamás añadir agua. Y segundo y último, prestad atención a la proporción de huevo cocido, creemos que ésta debe de ser más o menos de 1/2 huevo por persona (tamaño L) más o menos, nosotros éramos tres, así que usamos huevo y medio. Hemos visto por internet proporciones diferentes y esta va bien. Comentar que hemos probado a echar menos cantidad (1 huevo para 4 comensales), y de esta forma comprobamos que a la porra le faltaba textura y sabor.
Vamos pues con la receta del salmorejo sin pan (sin gluten). Os vamos a indicar mejor los ingredientes por persona. Unos 350 g de tomates (por persona = pp), 1/2 huevo cocido (pp), 1/2 diente de ajo (pp), 3 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra (pp) y sal al gusto. Opcional, un poco de vinagre si se desea. Acompañamientos, huevo duro, jamón ibérico, melva, bacalao en salazón, caballa en conserva, fruta etc.
It's interesting how a simple change can totally transform a recipe. I love the idea of using a hard-boiled egg instead of bread it's such a clever way to keep the creamy texture while making it gluten-free. It's too bad your son still found it heavy, but it's great that it's a good option for others. Your tip about using pear tomatoes is really helpful.
ResponderEliminarI've just published a new post on my blog