Seguimos en plenas fiestas navideñas y aún quedan por delante unas cuantas comidas familiares. Muchas veces lo más complicado de pensar es qué entrantes o aperitivos poner antes de los platos principales que sean sencillos de preparar, que gusten a todos y qué sean especiales. De hecho, en estos días intentamos alejarnos un poco de lo habitual descartando opciones tan clásicas como el embutido, las conservas de mar o los snacks. Así que hoy os vamos a traer una serie de ideas de entrantes que consideramos que son sencillos, son originales y están buenísimos.

1. Ensaladilla de alcachofas. Una buena ensaladilla de alcachofas creernos que es algo original y exquisito. La clave para que salga perfecta, es usar mayonesa casera, y también, una buena conserva de alcachofa de Tudela junto a una buena conserva de bonito del norte en aceite de oliva. Todo lo que escatiméis irá en contra del resultado. La mayonesa casera la tendremos que preparar con un punto ácido elevado, esto le va muy bien a la alcachofa en conserva y hace que el bocado sea más redondo. Pero ojo si no queréis preparar una mayonesa casera, no pasa nada, podéis usar una lactonesa (con leche) y con ese punto subido del ácido, o una mayonesa comercial que os guste (nuestra favorita sin duda es Musa) con el añadido de unas gotas de limón.

2. Almejas en salsa verde. No pueden ser más fáciles y más deliciosas, las almejas en salsa verde solo requieren de una almeja que sea de calidad, cosa que este año parece que es difícil esquivar un precio alto. Pero si os lo podéis permitir, a nuestro juicio este entrante no puede ser más rico, y además, ligero. El jugo que desprende la almeja sumado a la salsa verde, es absolutamente delicioso, y vuestros comensales van a disfrutar de lo lindo mojando pan en la salsa. 

3. Mejillones con pipirrana. Es una receta sencilla que preparamos a menudo, pero que consideramos que viste igualmente una mesa festiva. Ese mejillón bueno, de buen calibre y con frescura, es difícil de acceder a él, pero si vuestro pescadero os lo recomienda, no es algo que suba mucho de precio en Navidad y si es un marisco exquisito a un precio de escándalo. Cocerlos es el verdadero arte, pero lo que os hemos dicho muchas veces, si el ejemplar es bueno, podéis permitiros errores, van a quedar bien siempre. Y por último para la pipirrana, ponerle las hortalizas frescas que más os gusten, podéis introducir pimiento amarillo en vez de otro, especias frescas, o bien, algún encurtido picado, el caso es que ese añadido sea refrescante y el mejillón se disfrute mucho.

4.  Cóctel de gambas o langostinos. Un entrante clásico donde los haya pero que a mí personalmente me encanta. La salsa mayonesa es indiscutiblemente la salsa estrella en cualquier celebración Navideña, y con ese toque de tomate, salsa Perrins, zumo de naranja etc, es una delicia. Si a esto le sumáis, el dulzor de la piña, las lechugas (casi mejor romana que no mezclas) y si queréis, el aguacate y el rape cocido, es una maravilla. Yo tomaría cóctel de gambas o langostinos una vez a la semana.

5. Ceviche de berberechos y champiñones en conserva. Un ceviche es un plato que pocos se esperan, y la verdad, es que conocemos poca gente que no caiga rendido a los contrastes agripicantes de su bocado. En este caso no vamos a proponeros pescados, descubrimos una curiosa combinación de champiñones frescos (lo que leéis) y unos buenos berberechos en vinagre, algo que hasta que no lo probamos, no nos lo creímos. Y es tan fácil prepararlo, y es un entrande tan agradecido por su sabor y ligereza, que se nos antoja ideal para ponerlo en estas fechas. Eso sí, no escatiméis en la calidad de la conserva, eso se nota.

6 y 7. Patés variados, paté de jamón con queso crema y cremoso de 3 quesos con nueces. Dos patés untables que podéis hacer todos en vuestra casa con ingredientes sencillos. Los dos son adictivos, aunque quizás el de jamón nos guste un poco más. Pero a mi madre, por ejemplo, le encanta el de queso con nueces, y como ambos se complementan bien, si ponéis los dos, pues mejor que mejor.

8. Canapés variados. Desde hace más de 40 años servimos un día de Navidad, y como entrante, unos canapés en tostadas de algunos ahumados como bacalao ahumado, salmón ahumado y la conserva de huevas de mújol, un sucedáneo que en casa nos gusta desde siempre y del que ya os hemos hablado en el blog. Estas tres opciones, se llevan preparando décadas y no nos cansamos. Podéis añadir una opción más anchoas y mantequilla, o con pimiento del piquillo y ventresca de bonito del norte. Hagáis los que hagáis, van a gustar.  

9. Tartar de salchichón de Málaga. Curioso este tartar de salchichón que probamos hará unos años y que tras verlo en algunos sitios lo preparamos en casa y nos fascinó. Lo único, es encontrar un salchichón tierno fuera de Málaga, sabemos por ejemplo que los supermercados Ahorra Más a veces lo tienen, y también Hipercor, pero si no, existen fuets muy tiernos que podrían servir, aunque hay que reconocer que se pelan muy mal. Que sepáis que si os gusta se puede pedir online a casas afamadas como Prolongo o Fernández, pero este año ya no os da tiempo. El caso es que cuando lo probéis, vais a disfrutar mucho de ese contraste entre el toque sabroso del embutido con los aliños clásicos del tartar de carne.

10. Crema de setas. Otra opción es poner de entrante una crema ligera y sencilla. De todas las que tenemos, ésta quizás sea la más sencilla destacando por su sencillez. Sólo hay que adquirir un variado de setas congeladas, nata o leche Ideal, y un caldo de verduras o ave (en brick), en este punto no deberíais de escatimar. Existen quizás otras opciones más rebuscadas con setas frescas y fondos hechos en casa, pero así, queda muy bien. No obstante si os gusta la idea de poner una crema de entrante os pasamos el enlace a nuestras más de 50 cremas de verduras.

11. Rilletes de salmón. Otro plato original que hicimos hace unos años y que nos encantó. Se trata de mezclar salmón fresco cocido, un lomo de salmón ahumado, junto a crema fresca y mantequilla y una serie de aderezos que lo hacen sabroso y especial, no tiene mucho más. El bocado es adictivo y untado en panes tostados queda muy bien. 

12. Salpicón de mi suegro Emilio. Consideramos que preparar un buen salpicón no es complicado, con buen género, hortalizas muy frescas y una vinagreta suave, queda fantástico. Y es verdad que en nuestra familia hay dos salpicones, el que se ha hecho en mi casa hace años, salpicón que ya no sea hace, y el que se prepara en casa de mis suegros desde hace unos años, que lo prepara él y que gusta mucho. La versión de mi suegro se caracteriza por llevar sucedáneo de cangrejo, pulpo, langostinos cocidos y mejillones cocidos. Se aleja del canónico con bogavante, cigalas, rape, buey de mar, centolla, cangrejo real etc, pero vamos, ni en mi casa se ha hecho así. La clave de su éxito es utilizar un poco del agua de cocción del mejillón (al vapor) para añadir a la vinagreta, y servir con cebolla roja, pimiento verde, pimiento rojo, aceite de oliva, vinagre y sal. No tenemos publicada la receta, pero mientras tanto, os dejamos por aquí el salpicón de mi casa que a diferencia del suyo no lleva palitos de cangrejo y sí lleva cigalas.  

Carlos Dube.