Desde siempre nos han encantado los salteados de verduras, sobre todo cuando aprendimos que el secreto de un buen stir fry (salteado) es pasar por la sartén las verduras sólo un momento, además sólo el tiempo necesita cada una, sin que queden sobre cocidas. Y no pasa nada porque las verduras tengan ya un tiempo en la nevera, es decir, que hayan perdido esa frescura, de hecho, siempre hemos preparado estos platos cuando pasa esto para así darles una nueva oportunidad.
En esta ocasión aprovechamos el alforfón o trigo sarraceno que nos regaló una amiga ucraniana y que es el que producen en su familia y que pudo traérselo este pasado verano. Un trigo que ellos comen todas las semanas y que cocido, acompañan guisos, asados, pescados y que bueno, vimos ideal para saltearla a modo de chaufa, como aquella chaufa de quinoa que os mostramos hace años. También usamos un poco de arroz blanco que nos sobró del día anterior, y también un poco de brócoli hecho al vapor que también nos sobró, como veréis, receta de aprovechamiento total.
Vamos pues con este salteado de trigo sarraceno, pollo y hortalizas. Para 2-3 personas, 125 g de trigo sarraceno, 3-4 solomillos de pollo de grano, 1 vaso de arroz cocido, 4-5 flores de brocoli, restos de pimientos (rojo y verde), 1/2 calabacín, 100 g de setas shiitake, 2 zanahorias, un poco de repollo, unos cebollines o cebolleta fina, aceite de girasol u oliva, una mezcla de ajo en polvo, cebolla en polvo, orégano seco y jengibre en polvo a partes iguales, pimienta negra, sal y una pizca de cayena (opcional). Tiempo de preparación 30 minutos.
Ahora hay que aprovechar el sabor que ha dejado el pollo en la sartén para que los ingredientes que tenemos cocidos previamente, se impregne de este sabor residual, ya que están algo sosos, y de paso, los deshidrataremos al fuego un poco. Acordaros, que cada uno que salteemos le echaremos un poco de la mezcla de especias y por supuesto, un pelín de aceite.
Nosotros primero rehogamos el brócoli hasta que doró, lo apartamos junto al pollo reservado, en esa misma sartén salteamos el trigo bien escurrido también con las especias y otra pizca de aceite, y una vez haya rehogado echaremos sobre él, el pollo y el brócoli reservados y los jugos de la bandeja, removeremos bien y apartemos todo de nuevo a la bandeja. Por último, en la sartén saltearemos el arroz también con un poco de aceite y especias hasta que éste tueste un poco, cuando acabemos echaremos todo lo de la bandeja sobre el arroz y mezclaremos. Ya sí apartaremos todo de nuevo en la bandeja y reservaremos. De esta forma no nos dejamos ni un ápice de sabor.
Una vez esta parte esté lista, vamos con el salteado de verduras. Todas llevarán también las especias, un poco de sal y un poco de aceite. La forma de cortarlas es la que os guste, nosotros lo hicimos así, pero si os gusta de otra forma, pues adelante. Siempre las removeremos como si estuviéramos usando un wok y el fuego será fuerte. Cuando estén listas, cada una a su tiempo, las sacaremos a la bandeja que tenemos aparte con el arroz y el trigo.
Primero salteamos el shiitake y cuando empezó a brillar lo sacamos a la bandeja (3 minutos), después los pimientos (2 minutos), la zanahoria (3-4 minutos), el calabacín (1 minuto), la col o repollo (2 minutos) y el cebollín sólo que toque la plancha (20 segundos).
Lo que luego hicimos fue mezclar todo y calentarlo a fue muy fuerte en la sartén durante 1 minuto y servir.
Una locura.
Carlos Dube.
Ummm m flipan los salteados, q. Buena pinta Este
ResponderEliminarHola Carlos,
ResponderEliminarNunca he probado el trigo en un salteado, pero con el pollo y las otras verduras, resulta un plato muy colorido, nutritivo, sano y de lo más apetecible.
Encima es económico y se le da salida a restos de verduras que quedan pululando por el frigorífico, de restos de otras preparaciones, así que no se puede pedir más.
Besos
Me encantan estas recetas, con quinoa también esta rico , trigo tierno ... vivan las mezclas
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