La preparación con piña natural es sólo para gourmets, porque en otras ocasiones la hemos preparado con piña en conserva y, aunque los matices queden diferentes, está también muy buena. Por suerte, esta piña que compramos resultó estar buena. pero llevábamos un tiempo comprando piñas de varias procedencias (africanas, costarricenses etc) y no nos estaban gustando nada, tuvimos suerte la verdad. Y por último, preguntaros una cosa ¿no os apetece aprovechar un triste solomillo de cerdo en una elaboración con la que triunfaréis en una comida para amigos, familia etc?. Yo ni me lo pensaba.
Ingredientes para 3-4 personas, 1 bote de piña en almíbar (1/2 piña natural con su jugo), 1 solomillo de cerdo blanco, 8 ciruelas pasas, 1 puñado de piñones, 8 orejones o una rica mezcla de frutas deshidratadas (pasas sultanas, papaya desecada, mango desecado, coco laminado, etc), 1 puñado de pasas sultanas (si no elegís esta mezcla), medio vaso de caldo de pollo, harina floja de trigo, 2 cucharadas soperas de brandy, aceite de oliva virgen extra, sal y pimienta.
Si lo hacéis con piña natural pelaremos la misma hasta dejar las rodajas sin el centro. Vamos con el almíbar.

Pesaremos 100gr de azúcar y 150gr de agua, aunque nosotros le echamos además el zumo de las cáscaras de la piña.
Aquí las cáscaras.
Y las exprimimos.
Ahora cortaremos la piña en trozos...
Y la echaremos en el cazo u olla, y lo llevaremos a hervir a fuego medio. Nosotros tardamos unos 10 minutos dando vueltas de vez en cuando. Cuando hierva, apagar y dejar reposar 1 hora.
Cortaremos el solomillo en medallones y salpimentaremos una vez limpio totalmente de grasa.
Enharinaremos.
Y marcaremos en una cazuela amplia con medio vaso de aceite de oliva. Conforme vayamos dorando los trozos los iremos reservando en un plato.
Quitaremos parte del aceite y echaremos las frutas (a excepción de la piña) y frutos secos a rehogar sin sal.
Curiosamente olía de maravilla. Una vez rehogados echaremos el brandy y si se desea flambearemos. Acto seguido el caldo de pollo.
Dejaremos reducir unos 10 minutos.
Echaremos la piña y 8 cucharadas de su almíbar. Dejaremos llegar a la ebullición.
Echaremos el cerdo sin amontonar, cubriremos de agua y probaremos de sal.
Tapamos y lo dejaremos cocer 30 minutos.
Destapamos y dejamos que la salsa reduzca subiendo el fuego. Al final queda algo meloso, incluso gelatinoso, dulcecito y de un sabor excepcional. Vuelve a demostrarse que la carne de cerdo es ideal para estas preparaciones (os recordamos ésta). No me digáis que de la melaza resultante no parece la de las ¡¡torrijas!!.
Nosotros lo acompañamos con un arroz basmati cocido al vapor, previamente reposado en agua.
Lo de siempre, lo que sobró, al tupper!!
Salud.
Los guisos de esta casa, son para mojar y mojar...que maravilla. Gracias!
ResponderEliminarCarlos, ya se me empiezan a acumular las recetas!!!! El pollo del otro día, este solomillo de hoy,... y lo que nos falta!!!!
ResponderEliminarMe encantan las recetas de cerdo agridulce, creo que es una combinación perfecta y el acompañamiento de Arroz Basmati, me encanta!!
Las fotos no pueden ser más elocuentes, esos colores, ese brillo... tengo que hacerlo!!!
Un saludo, Begoña
Anda que no me gustan a mi este tipo de platos! Yo suelo hacer el cerdo con piña, y también un solomillo con pasas, pero esta combinación de frutas secas me ha dejado con la boca abierta, ern cuanto vaya al súper me la voy a traer...a mis hijos no les gustan las frutas secas, pero ellos que se coman la carne y yo me como el resto...
ResponderEliminarUn besazo.
Reconozco que sobre el papel este tipo de platos agridulces me gusta mucho, pero luego me empalagan enseguida.
ResponderEliminarRecuerdo hace muchos años en Lanzarote. fuimos a comer a un restaurante muy bonito en un castillo. El plato estrella era solomillo agridulce, con piña, ciruelas y no recuerdo qué más frutas llevaba. Lo pedimos y un amigo mío pilló un cabreo monumental porque decía que el postre no se mezclaba con el solomillo, hombre, por favor.
Nos hartamos de reir. No deja de ser una anécdota que se me ha venido a la cabeza asta receta muy parecida.
Me he encantado el pollo al vino tinto. No solemos usar el tinto en la cocina con las carnes blancas, y no se por qué. Queda fantástico.
Un abrazo.
si a un buen solomillo de cerdo, le unimos como queda una buena piña en almíbar, ya el resto que le pongamos, sólo servirá para hacerlo mas delicioso aun
ResponderEliminarUn abrazo
La carne de cerdo es fantástica para combinarla con frutas y este guiso es realmente goloso: esa salsita espesa pide pan a gritos.
ResponderEliminarBicos
Sinceramente Carlos eso no tiene que estar bueno ... tiene que estar buenísimo!!!!
ResponderEliminarUn saludo cocinero!!
Otro dulce-salado que ha hecho que me relama de gusto. Según iba viendo el paso a paso me decía, Silvia, esto tiene que estar buenísimo y al ver el resultado final he quedado convencida del todo. Qué delicadeza y qué ricura de plato.
ResponderEliminarBesos.
Carlos, mi marido siempre me dice esto cuando yo salgo con un plato de corte dulzón, "rico, pero para de vez en cuando", es que yo soy la reina de la prueba y me encantan las mezclas extrañas o fuera de lo normal. El proceso de este plato me parece fabuloso y lleva toda una preparación con esa piña al estilo Begoña.
ResponderEliminarMe apetece, desde luego, probar este manjar, seguro que es delicioso.
Buena semana amigo!
Seguro me encanta este plato, me ha hecho recordar a los chiles en nogada, recuerdas? mezcla de cerdo, res y frutas...que da una exposión de sabores..
ResponderEliminarBuenísimo!
besos
Gaby
Ummmmmmmmmmm... ya sólo el aspecto es maravilloso. Me imagino el aroma. Me encantan ess platos pero es verdad que deben comerse con moderación pues son muy dulces.
ResponderEliminarUn besote
Delicioso, solo el nombre hace la boca agua. Yo tengo una piña hawaiana deliciosa, solo me falta la carne de cerdo y algunas cositas mas. Pero vale la pena . Desde Costa Rica un beso
ResponderEliminarIvonne
Ojú, que rico. Me encantan estas mezclas.
ResponderEliminarNavegando por los blog, ( que me gusta bastante y descubro mucho). He hecho una paradita en este y como me ha gustado bastante, pués con su permiso me quedo ojeando por su cocina y me hago seguidora.
Un saludo.
Por fin me animo a comentar, felicidades por el blog (uno de mis imprescindibles diarios). A mi chico le encantan este tipo de platos con piña y me voy a animar a preparárselo este fin de semana como sorpresa. ¿Se podría cambiar el solomillo por otra cosa?
ResponderEliminarUn saludo y sigue así.
Paula
Paula: se me ocurre pollo, quedaría también muy bueno.
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