Hacía tiempo que no contábamos cosas sobre productos que nos han gustado, y llegó el momento de hacerlo. Hoy os traemos tres productos que llevan nuestro sello de calidad, nuestro sello de productos excelentes, ya que nos parecen de lo mejor que hemos probado en estos últimos meses. Empecemos por una salsa o aceite picante llamado Laoganma, lo probamos cuando fuimos en septiembre al supermercado Wenzhou para darnos una vuelta, y lo cogimos sin saber qué era, y madre mía, nos encanta. 

No se encuentra en los supermercados habituales, sí en tiendas asiáticas de alimentación e internet, de hecho, la última remesa, la hemos comprado en una tienda en la calle Juan Bravo. Este aderezo picante no recordó a la idea del Chipotle Chili Oil de la marca Salsas Sierra Nevada, ahora Doctor Salsas, pero claro, esta última es una salsa de creación reciente. Lao Gan Ma ('vieja madrina') tiene ya muchos adeptos fuera de China, hemos visto además por aquí algún artículo muy interesante en El Comidista (no os perdáis su historia), y la hemos visto en algunos videos de recetas como al gran Sam Way. La salsa está creada por una señora llamada Tao Guabi, una mujer emprendedora que ha dado sin duda con la tecla, y que ha llevado este aderezo a lo más alto con miles de consumidores en todo el mundo.

Se trata de un aceite con tropiezos crujientes muy sabroso, ligeramente dulce, con toque ahumado y de una textura muy crujiente. No pica mucho y contiene muy pocos ingredientes, aceite de soja (45%), chiles variedad guizhou (25%), cebolla (15%), soja fermentada, glutamato, sal, azúcar, y pimienta de Sichuan, no contiene más. Es ideal para todo tipo de platos, pero sobre todo, lo vemos ideal para arroces, pasta, cremas de verduras o carnes. Sin duda, por los poco más de 3€ que cuesta el bote de 210 g, merece la pena. ¡Compradlo si lo veis!   

En otro orden de cosas, nuestros amigos Julián e Isa nos recomendaron hace unos meses las hamburguesas 99% de La Finca, que no es más que carne de su vacuno con un 1% de pimienta. La verdad es que los productos de La Finca siempre nos han gustado, aunque últimamente estamos tirando más de carne de ternera comprada en carnicería.

Hicimos una primera prueba con dos hamburguesas más a modo de 'smash', bien estiradas y más hechas de la cuenta, para rebajar su gran grosor, y nos parecieron buenas, pero sin grandes alharacas. Pero las siguientes las hicimos tal cual, es decir, sacándolas de la nevera una hora antes y poniéndolas a fuego fuerte 2 minutos por cada lado, y al final, salando (ojo que no tienen sal). De verdad que nos parecieron exquisitas.

Lo malo es que se encuentran sólo online y en el Hipercor, y lo malo del online es que tienes que hacer un gran pedido y congelar, y eso no nos gusta. Su precio en los lineales son 7,5€ y traen 360 g (180g cada una), pero creemos que vale cada céntimo de lo que cuesta.

Por último, comentar que la quinta gama se ha popularizado mucho en la hostelería durante estos últimos años entre otras cosas porque los bares trabajan bajo mínimos y hay ciertas preparaciones que requieren de mano de obra. Pues bien, cada vez nos encontramos más productos de buena calidad elaborados en obradores ajenos a los locales y que sorprenden por su sabor y textura. Ejemplos como pimientos rellenos, alcachofas confitadas, cachopos, croquetas, empanadillas etc. Pues bien, hemos ido a sitios en los que las croquetas (por ejemplo) nos han gustado mucho y qué sorpresa, que no las hacían ellos.

Pues bien, un día nos dimos una vuelta por la sección de congelados del Alcampo y vimos estas croquetas elaboradas en Madrid llamadas Croquetas Ricas y que por su presencia parecían salirse de lo habitual. No tienen el tamaño normal, son como unas bolitas rebozadas, y bueno, como los ingredientes eran bastante naturales (mantequilla, jamón ibérico, aceite de oliva, leche entera, harina etc) decidimos probarlas. Había de otros tipos (boletus, queso azul, puerro, bacalao) pero decidimos no arriesgar y comprar las de jamón ibérico (ya van dos veces). Ojo, no vimos las especiales para horno/freidora de aire que venden en su web. 

Seguimos las instrucciones para prepararlas, es decir, las dejamos fuera 1 hora, pusimos aceite de girasol muy caliente, las tuvimos 3 minutos girándolas para que no se quemaran, y voilá, tras reposar sobre un papel de cocina unos minutos, resultó ser una croqueta realmente cremosa, con trocitos de jamón y con un sabor que pocos podrían justificar que no es casera.

Su precio es de 3,40€ los 325 gramos, vienen 12 unidades, y es una opción interesante como fondo de congelador para servir como emergencias, siempre y cuando seáis de Madrid, porque dudamos que se vean fuera de aquí. No obstante, online, son accesibles desde cualquier sitio, y aunque salen algo más caras, hay un cupón de bienvenida que mejora el precio.