El brócoli es la verdura que quizás menos compramos. No sabemos muy bien la razón, creemos que es porque su sabor es algo insulso, o bien, por esos troncos de color verde clorofilado que llaman tanto la atención, desde luego, para nosotros no nos parece una verdura seductora. Además, a Jorge, nuestro hijo, no le gusta nada, pero la culpa es de la gente que ha bromeado tanto con ella que es como si se le impusiera un castigo. Pero el caso es que luego bien preparada nos gusta, y estamos viendo que hay algunas recetas, como la que hoy os traemos, en el que el denostado brócoli queda buenísimo.
Ahora recordamos otras buenas recetas con él, como aquel brócoli al horno con patatas y queso que se lo copiamos a mis suegros y que la publicamos hace bien poco, o aquel romanescu con bacon y queso, qué perfectamente se podía haber hecho con brócoli, era el 2007 ¡qué tiempos aquellos! Pero vamos, sin duda hemos llegado a la conclusión que a este tipo de crucíferas el queso gratinado les sienta muy bien, y no es para menos, el queso gratinado le aporta ese sabor que les falta.
Pues bien, la preparación de hoy se la vimos a unos italianos en las redes sociales diciendo que era maravillosa, y que, con algunos pequeños cambios, como el añadido de algunas especias para sustituir a la pastilla de concentrado de verduras, en casa también nos ha encantado. Si no encontráis la pasta farfalle, usad por ejemplo pajaritas, y si no otra pasta de bocado. La receta original llevaba farfalle y creemos que es todo un acierto.
Vamos pues con los ingredientes, para 3 personas, 1 tallo y medio grande de brócoli, 250 g de pasta, 1 cebolleta con su tallo verde y algunos tallos verdes de otras cebollas/puerros, 120 g de queso parmesano, 1 cucharada sopera colmada de pan rallado, un golpe de ajo en polvo, un golpe de cebolla en polvo, aceite de oliva virgen extra, sal, pimienta al gusto, y agua. En la receta original se le añade un poco de ajo a la cebolla. Tiempo de preparación 30 minutos.
Cortamos el brócoli en ramilletes descartando los tallos, lo lavamos todo bien. Los pondremos a cocer al vapor durante 10 minutos si os gusta algo cocido, o si os gusta al dente y de color más vivo, 4-5 minutos. Una vez cocida la verdura, la escurriremos bien. Cocemos la pasta en agua y sal el tiempo que indique el fabricante, y mientras picamos la cebolla y los tallos en brunoise. Los soasamos en una cazuela capaz, si se quiere añadir el ajo se añade, junto a un poco de aceite de oliva, sal y pimienta. Y mientras, podremos ir rallando el queso y reservar.
Los ramilletes escurridos los picamos un poco, y los echamos en la cazuela a rehogar con la cebolla. Añadimos las especias y el pan rallado, y probaremos de nuevo de sal. Luego echaremos la pasta directamente de la cazuela de cocción, y algo de queso parmesano. Removemos bien y cuando se quede algo seco echaremos algo más de agua de cocción, debe de quedar un bocado jugoso. Dejamos reposar el plato 5 minutos y servimos con más queso rallado por encima.
Son ideales para tupper.
Carlos Dube.
Para qué es el pan rallado?
ResponderEliminarEn el video donde lo vimos, se lo preguntaba hasta el nieto de la nonna que lo preparaba, ella dice que se echa para que el plato quede perfecto, supongo que su función es darle un toque rústico al bocado. Puedes ver el video aquí.
EliminarUn saludo.
¡Qué interesante! nunca se me hubiera ocurrido. Un saludo
EliminarEn la cocina siciliana se hace algo parecido. En la pasta "co lu brocculu", se añade, si se quiere, por encima, al final. Se tuesta primero y se pone, aparte, como si fuera queso (se llama "mollica" o "muddica" o queso de pobre😉😋)
EliminarEsa receta que habéis seguido, yo la cambiaría 🤣🤣 Por ejemplo, por esta https://fb.watch/jz_PcCw_30/ (aunque en mi casa no se pone cebolla, si no con ajo)
Ummm m encanta la pasta así
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