Además han utilizado un packaging bastante atractivo, al menos eso nos ha parecido a nosotros. Se trata de varias fotografías antiguas, en blanco y negro, de chicos jóvenes, fotos evocadoras y muy entrañables. En ellas se intuye amistad, inocencia, aquellos largos veranos, familia y en definitiva tiempo de juventud y diversión, fotos que además plasman una época en la que los valores eran diferentes y los momentos entre las personas se disfrutaban al máximo. No lo sabemos a ciencia cierta, pero tiene toda la pinta que son fotos suyas familiares, no cogidas al azar.
Y en su interior el verdadero protagonista, la patata frita. Fuera hablan de la calidad de los ingredientes y de la fritura en sartén, una información que siempre se agradece. Hablan también de los aceites empleados en su elaboración (picual y hojiblanca) y de la sal, proveniente del Valle de Añana (Álava). Pero sólo falta hablar de las patatas, hablan poco o nada. Parece que son gallegas sí, pero poco más, es cuanto menos curioso que se olviden del dato más importante, las variedades empleadas y algo de su trazabilidad.
Y sin duda la fritura es extraordinaria, el corte de la patata es medio, es decir, ni muy frágil ni muy grueso, y se conservan muy bien dentro de la bolsas con unos tamaños muy agradables en boca. La bolsa posee una atmósfera protectora a base de nitrógeno que realiza perfectamente su función antioxidante y evita el enranciado de las grasas, algo que por otro lado llevamos viendo desde hace años en otras marcas y es muy de agradecer que las empresas se suban a este carro.
El bocado bien suflado, nada graso y bastante natural, el ejemplo lo tenéis en que hay pequeños trozos o extremos de algunas patatas algo más duros y otros extremos algo más blandos, como las patatas fritas de verdad. Además su color, aroma y sabor roza la perfección, con un extraordinario punto de sal.
Echamos de menos más cantidad en cada bolsa, esto es broma, pero vamos, la bolsa fue vista y no vista cuando la abrimos para compartirla durante el pasado partido contra Portugal. Repetiremos su compra.
En definitiva, se han convertido en una de las mejores opciones de patatas fritas de aperitivo por su excelente relación calidad precio. El precio de la bolsa es de aproximadamente 2€ los 150gr, no lo vemos caro teniendo en cuenta lo que disfrutamos. Esperamos verlas con el tiempo en muchos más sitios.
Salud.
Pues tienes razon con lo de las fotos, pone esto en su página ver web: "Completaron la imagen con colores y fotografías con cierto aire vintage, en las que usaron sus propias fotografías familiares de los veranos de su niñez, buscando ofrecer la mejor patata frita con una relación calidad/precio insuperable y que llegue al consumidor en óptimas condicione"
ResponderEliminarMuy buenas patatas inmejorable calidad, yo fui a la fábrica a enseñarles a freír con esas maquinas en la inauguración de la misma en los primeros días, la lástima es no haberme quedado allá trabajando con ellos
ResponderEliminarHemos repetido muchas veces, son una maravilla
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