Hola chicos, que cerquita están ya las vacaciones ¿verdad?. Va a empezar la época de playa o montaña, de calor, de muchos viajes, de muchos bares y restaurantes, y en casa de gazpachos, ensaladas. Y sobre éstas últimas, espero en el blog estar a la altura de las circunstancias, ofreciéndoos algunas propuestas interesantes para esta estación, porque chicos, hay miles de combinaciones y de oferta en general, no tenéis más que daros una vuelta por Internet para daros cuenta de la cantidad de tipos de ensalada que existen para degustar estas vacaciones.


Pues sobre estas ensaladas, hay algunas muy antiguas, más incluso que las ensaladas más conocidas, como es el caso de ésta que os voy a enseñar en breve. Antes de nada os cuento que en mi casa desde hace ya un par de años ha empezado a pegar fuerte el apio en ensalada, sí, esa hortaliza con fuerte sabor que a muchos no gusta y que a otros apasiona, aunque os digo también que por aquí se usa muy poco en crudo en comparación con otros países, eso significa que aún no lo sabemos apreciar y que el uso más habitual en casa está todavía por venir, en este caso estamos cometiendo un error porque es una hortaliza muy sana, muy diurética y sin nada de calorías. Ya en un post más antiguo le dedicamos un reportaje especial a esta bella planta (porque mira que es bonita), en el que resaltaba ésta y muchas más cuestiones. De todas formas, insisto, muchos no la habéis probado en crudo, y os recomiendo encarecidamente que al menos le deis una oportunidad.

Pues al grano, mirando en Internet estos días rescaté esta curiosa forma de preparar un apio limpio y fresco, con manzana, mahonesa y nueces al más estilo ensalada alemana, pero con un toque muy casero y mediterráneo, la mayonesa hecha con aceite de oliva y una variedad más extensa de frutos secos. La receta la ojeé de la web de Cristina Galiano, la cuál la recupera nada más y nada menos del hotel Ritz de Madrid, aunque nos advierte que ha probado la original, mucho mejor está la versión española, y creo que no le va a a faltar razón.

Porque si alguno no la conocéis, la receta es originaria de los Estados Unidos, y es muy antigua, concretamente surge en el año 1893 cuando en el famoso hotel Waldorf de Nueva York (luego pasó a ser Waldorf Astoria en 1931) el maître, suizo de nacimiento, llamado Oscar Tschirky, creador de bastantes platos (huevos benedictinos, salsa mil islas, o la ternera Oscar con espárragos), la presentó por primera vez a los clientes. En este año, aunque os podréis imaginar que el comienzo de esta ensalada ha sido objeto de disputas entre varios chefs. Lo que sí que está claro es que procede de estas instalaciones y que en 1896 esta ensalada (Waldorf Salad) aparece ya oficialmente en el libro de cocina "The Cook Book by Oscar of the Waldorf".


Pues nosotros no la hemos probado nunca, en casa preparamos el apio aliñado con mostaza, pero os aseguro que la próxima vez la vamos a preparar así, porque tiene muy buena pinta.


Os dejo ya la receta de Cristina, y espero dejaros fotos pronto.

ENSALADA WALDORF

INGREDIENTES

Manzanas Golden y apio blanco (70% y 30%)

Hojas de Lechuga Verdes
Nueces recién peladas
Salsa mayonesa hecha (bastante zumo de limón)
Azúcar
Apio en polvo
Nata líquida
Pasas
Piñones
Pechuga de pollo ahumada
Sal
Pimienta Blanca recién molida

PREPARACIÓN

Preparar una mayonesa muy ácida sólo con limón y un aceite de oliva que sea muy suave, aunque si tenéis sólo aceite de girasol, podéis usarlo. A la salsa añadir un chorro de nata líquida para cocinar, un poco de azúcar y apio en polvo (se vende en los super). Si se encuentra sal de apio, utilizarlo en la mayonesa.

Pelar ahora las manzanas (tienen que ser Golden), cortarlas en cubos rápidamente y echarlas inmediatamente a la mayonesa para que no se oxiden. Limpiar del apio las hebras duras que pueda llevar y picarlo fino. Echar la lechuga en tiras, las nueces en trozos o enteras y las pasas. Si os gusta echar el apio en cubos pequeños.

En la web usan ahora pechuga de pollo ahumada comercial (dicen que se vende en El Corte Inglés), yo voy a proponer echar pechuga normal a la brasa, hecha despacio en una sartén con unas gotas de aceite (y sal), cortada en cubos. Echar los cubos y algo más de nata si fuera necesario.

Remover todo. Decorar con piñones y alguna nuez.

Servir muy fría.

Os dejamos por aquí la receta de la ensalada Waldorf paso a paso.

Salud.