De aquel libro de recetas de pasta de la extinta marca Ardilla se me quedaron grabadas algunas recetas, hay que ponerse en situación, tenía 16 años cuando lo ojeaba y todo me parecía muy novedoso y seductor. Ya os mostramos en el 2008 los espaguetis del jefe hechos con pasta nero di sepia, pues bien, ahora estos macarrones con pollo y requesón, que en verdad es como una pasta con quesos y algo de carne. La verdad es que nos ha gustado mucho, pero sinceramente, la esperábamos algo más liviana, llena bastante y quizás le hubiéramos añadido una pizca de leche ideal o nata de cocinar para que todo se integrara mejor a la hora de mezclarlo. Así que os vamos a animar a hacerlo.
El plato de pasta no tiene ningún misterio, se mezcla todo en frío y al horno. Nosotros la hemos hecho comprando una pechuga de pollo comercial ya asada, aunque ya os decimos que quedaría aún mejor con pechuga de pollo asada casera, porque a este tipo de asados comerciales les añaden conservantes que le dan una textura algo irreal y ese sabor un pelín ácido que le hacen ser más un fiambre que una carne asada. Pero bueno, podéis hacerlo con este tipo de preparados porque no quedan mal.
Vamos pues con estos sencillos macarrones con pollo y requesón, nosotros hemos variado un poco las cantidades. Para 3 personas, 250 g de macarrones, 150 g de pechuga de pollo, 100 g de ricotta o requesón, 120 g de queso gruyere francés, 80 g de mantequilla, agua, pimienta y sal. Opcional, un chorrito de leche Ideal o nata para cocinar. Tiempo de preparación 1 hora.
La preparación consiste en rallar el queso gruyere, en partir la pechuga en trocitos menudos y mezclar todo el gruyere con la mitad de la mantequilla (a temperatura ambiente), el requesón y casi todo el pollo, aunque de este último dejar algo para la cobertura. Mezclarlo añadiendo pimienta y ese chorrito de nata o crema de leche que os comentamos. Reservar y meter el resto de mantequilla en la nevera. Cocer la pasta en abundante agua con sal y escurrir.
Ahora algo importante, con la pasta sin enjuagar bajo el grifo y aún muy caliente mezclar con estos ingredientes con la ayuda de una cuchara. Hacerlo ya en una cazuela de barro con trozos de pollo por encima y el resto de la mantequilla fría en trocitos. Nosotros rallamos además parte de la corteza del queso a modo de queso rallado. Si no tenéis, no pasa nada, podéis no añadir nada o si queréis más queso pues gruyere.
Qué buena pinta! Habrá que probar a hacerlos ;-)
ResponderEliminar