Probamos hará casi un año la ginebra Monkey 47, una ginebra de tipo london dry pero alemana (lo que oís) que no conocíamos y que nos sorprendió a todos por su aroma y sabor. De hecho, y sin que exageremos lo más mínimo, es una ginebra que si la oléis tiene matices de perfume de altos vuelos y esto es sólo debido a que en su interior descansan los aromas y sabores de 47 botánicos y de ahí que su nombre sea Monkey 47 (tenéis un buen resumen de los botánicos en la web del sitio). Desde luego que cuando la probéis muchos vais a descubrir una ginebra de sabor diferente, algo único dentro de la oferta existente, su calidad y sabor os convencerá, y es que de hecho muchos dicen que es una de las mejores ginebras del mundo. ¿Será esto cierto?


Cuenta la historia, aunque a nosotros nos ha parecido difícil de creer, que esta ginebra y su nombre vienen de las andanzas de un alto cargo militar inglés llamado Montgomery Collins el cuál en 1945, y viendo el deterioro que sufrió Berlín la ciudad tras la Segunda Guerra Mundial, decidió colaborar en la reconstrucción de la ciudad con especial hincapié en la rehabilitación del zoo, sitio que el consideraba que se tenía que poner en marcha cuanto antes para animar a los ciudadanos. Él con toda su buena intención, apadrinó con su dinero un macaco llamado Max. Cuando acabó su estancia en el ejército en 1951 decidió quedarse en Alemania y mudarse a la preciosa Selva Negra donde acabó inaugurando una especie de apartamentos rurales a los que llamó 'Zum Wilden Affen' algo así como 'El mono salvaje'.


Tuvo que ser este hombre una persona algo inquieta porque en sus ratos libres (que los tendría sobre todo en invierno) como buen inglés se empezó a interesar en el mundo de la ginebra y empezó a experimentar con destilaciones hechas con aromáticos muy variados como plantas, flores, frutos propios de la zona y muchas de las especias que él conoció y se llevó de su larga estancia en la India como hijo de diplomático que él era. Tras varios años probando ingredientes y fórmulas llegó a conseguir una compleja receta que él producía a nivel particular y que consumía con familia y amigos.

Dicen que cuando murió a finales de los 60, nadie se podía imaginar que hará unos años, momento en el que alguien (no lo especifican) reformó la pensión, se descubrió una caja con una (o algunas) botellas de ginebra, fotos, apuntes con sus progresos en la elaboración de la ginebra y una carta. En la etiqueta de las botellas rezaba el nombre 'Max el mono - Schwarzwald Dry Gin' y en la carta Collins explicaba los ingredientes empleados en su receta definitiva. No sabemos exactamente qué pasó después pero desde el año 2010 la destilería alemana Black Forest Distillers la comercializa porque alguien les dio la receta, y aunque todo esto fuera en parte ficción, ya os adelantamos que la ginebra posee una calidad y un sabor acorde a lo que esta historia viene a decir, naturaleza en estado puro para dar gusto a una ginebra de 10.


Cuando la probamos por primera vez en el restaurante Al Dente en Arroyomolinos la probamos en una gran copa de balón con un toque de angostura, tónica creo recordar que Fever tree y un poco de cáscara de limón, y la verdad, aunque nos costara una pasta la copa, la ginebra sin duda destacó entre el resto. Con las semanas la adquirimos gracias a un amigo y en casa la hemos probado de la misma forma, sólo con un poco de limón y con tónica Schweppes y la verdad, nos gustó de igual manera, y es que a esta ginebra poco hay que añadirle para poder disfrutar de un momento único y aunque la oferta de ginebras hoy por hoy sea demoledora, sinceramente, creemos que hay pocas mejores.

En cuanto a la cata se trata de una ginebra estilo inglesa con un 47% de alcohol, casualidades de la vida justo coincide con sus botánicos, y en cata sabor con mucho carácter en entrada tanto en nariz (floral) como en boca, ligeramente amarga en su gusto, poco dulce y muy equilibrada. No podemos sacarle aromas y sabores concretos porque es una bebida compleja, hay una lógica presencia de enebro, y luego frutos rojos, cítricos y algunas especias. Acabamos diciendo que quizás le iría muy bien la tónica Q-Tonic por su sabor suave y aguja ligera, pero ya os advertimos que poco cargada la copa con una simple Schweppes y un poco de cáscara de limón va estupendamente.


Las botellas están numeradas (sólo 2500 al año), tiene sólo 50cl de capacidad, tapón de corcho y un color oscuro que le transmite un estilismo muy antiguo, como una botella extraída de una botica, o de la bodega de un buque hundido. Su precio es alto, muy alto, esta ginebra tiene un precio que ronda los 80€ el litro, aunque esta botella se puede conseguir por unos 34€ en algunas tiendas especializadas. Un capricho que si podéis, os garantizamos que merece la pena probar. No nos dejamos guiar por los precios, nosotros pasamos mucho de todo esto, pero es que la sorpresa fue mayúscula.


Espero que si la probáis disfrutéis, y nos contéis ¡cheers!.

Salud.

** Mercado Calabajío recomienda el consumo responsable de bebidas alcohólicas. Bebe siempre con moderación, es tu responsabilidad.