Fin de semana en Plasencia

Hacía tiempo que los amigos no nos íbamos un fin de semana a una casa rural en régimen de alquiler completo, y por fin llegó el fin de semana. Después de llegar a un consenso y de bloquear un fin de semana de este mes para tal evento, al final fuimos a una bonita casa rural en Malpartida de Plasencia, localidad extremeña situada a 8 kms de Plasencia y muy cerca del parque nacional de Monfragüe. Y aunque Lola y yo ya estuvimos de paso en un viaje que hicimos por todo Cáceres hará 4 años, disfrutamos mucho del fin de semana y quizás dentro de un tiempo repitamos. Os contamos.


Salimos escalonadamente el Viernes por la tarde/noche, y habíamos acordado que entre todos íbamos a llevar alguna cosilla para nada más llegar, y sin apenas mover un dedo, preparar una cena para todos. Nosotros nos decidimos por llevar algo sencillo, embutido y una quiche lorraine de champiñones y bacon, una quiche que hemos hecho hasta la saciedad, pero justo aquella tarde tuvimos un pequeño accidente. Veréis, la hicimos tan grande que cuando fuimos a darle la vuelta no controlamos el peso y se nos escurrió en la pila de los cacharros desde la apertura que se formó entre las dos bandejas, una la del horno y la otra la que iba a ser la definitiva. Una verdadera pena porque la quiche estaba muy buena, y ésta se manchó de jabón y de restos de comida, así que no hubo más remedio que tirarla.

Aunque lo que más nos dolió fue tirarla a la basura, lo que más nerviosos nos puso fue que no sabíamos que llevar y teníamos una hora. Además, por haberla hecho el mismo Viernes comimos como pavos y entre los nervios, las prisas etc la comida no nos sentó bien. El caso es que al final se nos ocurrió comprar una empanada de la marca Zabala, no están como las de Pilar Lechuza, pero no está mal para unas prisas... Aquí os dejamos una foto de la reconstrucción de la quiche, y os aseguro que fue a duras penas.


Pues a la casa marchamos 4 coches, 10 adultos y 2 niños, y la casa se llamaba Tia Tomasa, una casona rehabilitada de dos plantas sita en el centro del pueblo muy cerca de la iglesia de Malpartida. La casa está nueva, está muy limpia, bien equipada, y todas las habitaciones tienen un baño grande. Tiene patio, jardín, porche y barbacoa, y en general, está muy bien preparada para recibir a muchas personas cubriendo todas las principales necesidades. La casa además tiene chimenea y también bomba de calor en todas las habitaciones, así que en invierno se está muy bien. Os la recomendamos sin lugar a dudas.


Pues una vez llegados todos, nos repartimos las habitaciones y empezamos a preparar la cena del Viernes. En verdad era la comida que íbamos a comer durante todo el fin de semana, así que veréis que servida casi toda en la mesa, era una barbaridad. Eso sí, como el Sábado íbamos a comer fuera en algún restaurante, y el Domingo íbamos hacer barbacoa, el resto de comidas iba a ser lo que fuera sobrando de esta primera cena.


Para que os hagáis una idea del reparto, entre todos llevamos 2 ensaladas variadas, varias bandejas de embutidos (queso de oveja, salchichón de bellota, chorizo de bellota y jamón ibérico), 1 tortilla de patatas, empanada de hojaldre de atún, ensalada de pasta, un bollo de atún, encurtidos variados y snacks. De vinos Txacolís, Albariños, vinos tintos, refrescos y cervezas. La reunión duró hasta tarde y amanecimos el Sábado a las 9:30.

Los desayunos eran en base a bollería, tostadas etc y hubiera estado muy bien hacerlo en el jardín, pero pese a haber sol (lo veréis en las fotos), durante todo el fin de semana nos hizo mucho frío. En el jardín de la casa se estaba en la gloria al sol, aunque a poquito que te sentabas en una sombra el fresquete era importante. Cuando todos desayunamos, nos arreglamos y las chicas fueron a la carnicería y a la panadería, donde pudimos comprar además de pan unos excelentes huevos de corral. Partimos hacia Plasencia.

Curiosamente y antes de que se nos olvide, en Malpartida hay una excelente agua del grifo venida desde El Piornal situado en el Valle del Jerte, una agua muy agradable y algo gruesa que recordaré siempre. Pero a lo que vamos, el plan era dar una pequeña vuelta por Plasencia para luego ir a comer a un restaurante del que ya os hablaremos (y muy bien) en otro post. Fuimos primero y sin dudarlo, a su animada Plaza Mayor, famosa por la figura del abuelo Mayorga sujetado con los brazos al campanario del Ayuntamiento, muñeco autómata que se mueve y hace sonar un carillón cuando el reloj de la torre da cada media hora. Después fuimos a comer.


Qué entrañable, en estas pequeñas plazas las gentes pasean, se sientan en los bancos, hacen compras, los niños corretean alrededor del centro de la plaza, y hacen acopio de las mesas exteriores de los bares y restaurantes donde tomar su aperitivo bajo los tenues rayos solares de estos meses de invierno. La verdad es que una vez allí uno se siente fenomenal, con tu cerveza fresquita, al solecillo y tomando una tapilla que para colmo era abundante y rica. Bien es verdad que era algo grasa pero seamos realistas, sólo estuvimos en el bar Manjuli. En la otra ocasión que estuvimos Lola y yo fuimos de tapas por la zona y nos gustó mucho.


Pues la jornada del Sábado transcurrió tranquila, que en el fondo es lo que queríamos, comimos y después de una larga sobremesa decidimos irnos de nuevo hacia la casa. Eran carnavales y había que vestir a las niñas con los disfraces y se estaba haciendo tarde. Unos cuantos nos quedamos rezagados por una hora en el globalizadísimo Carrefour de Plasencia dónde no pudimos encontrar nada que despertara nuestro interés. Sólamente compramos las cosas que nos hacían falta para la barbacoa del Domingo y como curiosidad, encontramos una botella de Tab de 2 litros, que es algo raro la verdad, y quizás las Tortas del Casar que estaban a 18€ el kilo, un precio realmente bueno. La fiesta de disfraces y globos para los peques estuvo divertida y la cena fue similar a la del Viernes.

Amanecimos todos sobre las 10, y la sorpresa vino cuando al salir al jardín comprobamos que el día se había encapotado y hacía más aire y frío que el día anterior. Hasta aquí no pasaba nada, pero era el día de la barbacoa. Así que todos pensamos que el día ideal hubiera sido el Sábado, pero claro, el Sábado comíamos por ahí, así que llegamos a la conclusión que al fin de semana le faltaban días. Así que nos los tomamos con calma y entre claritas, Coca colas etc nos pusimos a hacer una barbacoa con la que no nos complicamos, chuletas, panceta y choricillos caseros. A estas carnes las acompañamos con ensalada y con los restos de todo lo que quedaba, entre ellos los de una Torta del Casar que compramos el Sábado en la carnicería y que degustamos para cenar.

La barbacoa de la casa era de obra y lo agradecimos muchísimo porque estas instalaciones son muy cómodas y además estaba muy bien resguardada del aire que corría. La leña que nos dio el dueño (Fernando) era de encina, y aunque era ideal por las prisas echamos carbón vegetal.


Después de más de una hora preparando las áscuas, la chasca estaba lista para recibir las deseadas viandas cárnicas.


Y así fue. Quizás uno de los mejores momentos de este tipo de jornadas gastronómicas es cuando plantas las chuletas de cordero en esa parrilla casi incandescente, y empieza a oler a chuletas y áscuas. Quizás sea una de esas grandes sensaciones olvidadas en aquel foro de las 20 sensaciones en la cocina que hicimos aquí, en Mercado Calabajío.


Por último apuntaros que faltaba ese pequeño gran homenaje que es la pancetilla a la brasa y los choricillos o morcillas caseras, es algo impresionante. En esta ocasión el buen sabor de las carnes nos encantó y el pan con el que lo acompañamos.. madre mía, ¡qué pan compramos!. En fin, que ya habrá tiempo de bajar las grasas, esto hay que disfrutarlo al menos dos veces al año.


Al final charlamos, recogimos y el fin de semana acabó el Domingo hacia las 18:00 con más frío y algo de caravana, pero ahí quedaba el recuerdo de unos días de desconexión absoluta.

Salud.

13 comentarios:

  1. Cómo me gustan este tipo de escapadas!!! ...hace siglos que no me desmarco....
    Me alegro de que lo pasarais tan bien, y de que comierais tan superbien!!!! Las tapitas de Plasencia no tienen desperdicio... y esa barbacoa... no soy muy amiga de las barbacoas, pero esa carne...uhmm...qué pinta...
    Ya nos contarás donde comisteis...
    Un saludo, Begoña

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  2. Hace un año aproximadamente que estuvimos en el Valle del Jerte y nos encantó toda esa zona. Plasencia muy bonita la zona antigua y animadísima!
    Vaya comilona la de estos días, las barbacoas me encantan!
    Besos

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  3. Qué buenas esas escapadas con los amigos. Es una de las cosas mas gratificantes de la vida.
    Lo de la quiche, una pena, porque debía estar riquísima. Pero los nervios en la cocina, ya se sabe.
    Conozco toda esa zona, Malpartida, Monfragüe, etc.
    Me alegro que lo pasarais así de bien y en un entorno como ese.
    Un abrazo

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  4. Que envidia Carlos! Estas escapadas vienen muy bien para la mente, el cuerpo y la relación con los amigos ;)

    Un saludo

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  5. Hace muchos años iba mucho por esa zona, Valle del Tiétar, los pueblos de la Vera, Valle del Jerte y Plasencia. Creo que se habla muy poco de esas tierras y es una lástima. Tengo unas ganas locas de volver y con esto tuyo de hoy aun mas!!
    Un saludo

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  6. Pero Carlos por favor! a estas horas este post, y con las ganas de recreo que tengo!!!

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  7. Nosotros hacemos esta escapada dos veces al año una con niños y otra sin niños.La llegada a la casa es digna de verse,bolsas y bolsas de comida y ....bebida, todo hay que decirlo.
    Veo que todo seguimos el mismo protocolo de casa rural. Viernes cena fácil, Sábado, salida, Domingo ,barbacoa....
    Esos choricillos...¡ Qué buenos !
    Un abrazo,
    María José.

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  8. Qué divertidas son esas escapadas con amigos! Lo de la quiche fué una pena, pero creo que quisistéis hacerla demasiado grande, así no hay quién la maneje.
    Conozco muy poco de Extremadura y la verdad es que le tengo ganas...
    Un besico.

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  9. eso si que es saber aprovechar bien y de la mejor manera un genial fin de semana.

    Un abrazo

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  10. Eso , eso, fin de semana con buena cena, buen aperitivo, esa barbacoa que solo le falta el allioli (je, je) y sobre todo, lo mejor... buena compañía!!!!

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  11. Estas escapadas son obligatoriamente de barbacoa las ensaladas son para el lunes,martes ,miercoles ja, ja,
    Buen finde y que buena torta.
    Saludos

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  12. Hermoso fin de semana Carlos!

    Me anoto para el 27 (pisco sauer)y tambien para degustar un mojito, nunca lo he tomado.

    Un gran abrazo y gracias por comentar siempre.
    Besos!

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  13. Que pasa Carlos? te voi a bajar nota, uno que se curra tanto esos gisotes y cuando sale de casa flojea, donde esta un aliño para esas chuletillas tipo chimichurry? bueno, asi todo me alegro por vosotros y os recomiendo las casa rurales de Cantabria para estas escapadas!

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